Aprender a disfrutar con equilibrio es clave para poder llevar un estilo de vida saludable y esto incluye, también, en vacaciones. Las vacaciones y el ejercicio son dos actividades que reducen el estrés y aumentan la felicidad. ¿Por qué no podrían combinarse?

Existe el mito de que no se puede disfrutar de descansar incluyendo hábitos como el ejercicio o comer saludable. Se ha vuelto “normal” creer que, para disfrutar de unas vacaciones, los excesos son necesarios y la realidad está muy lejos de ello.

Es importante aprender que lo que le hace bien a tu cuerpo, es lo que realmente genera bienestar y disfrute. Vamos a recomendarte algunos tips que puedan ayudarte a disfrutar de unas vacaciones más equilibradas.

Puede que estés vacacionando en un lugar nuevo y qué mejor que conocer cada rincón del mismo caminando, andando en bici o, por qué no, trotando. Te sorprenderás incluso de que de esta manera se recorre mejor, a diferencia de en vehículo. Vas a lograr conectarte mucho mejor con el lugar que de la otra manera.

Tan solo 20-30 minutos todos los días o día de por medio pueden hacer una gran diferencia entre volver de unas vacaciones sin perder lo logrado y trabajado o volver con esos kilos de más.

La idea no es sentirlo como una carga, es darle amor a tu cuerpo y, dentro de todo el tiempo libre que uno tiene, hacer algunos movimientos de fuerza harán la diferencia.

No dejes de hacer: sentadillas, estocadas, elevaciones del pelvis, flexiones de brazos y todos aquellos movimientos que involucren la mayor parte de tu cuerpo.

Todos queremos olvidar nuestras preocupaciones y relajarnos cuando estamos de vacaciones, sin pensar en lo que estamos comiendo y cuánto, pero es posible hacerlo sin perder el autocontrol.

En cuanto a la alimentación, tomalo con calma, relajate, date el capricho y disfrutá, sabiendo que no es necesario que todo sea a lo grande. No comas hasta no dar más y si quedás con hambre intentá saciarte con algo más saludable, es un equilibrio. Si te gusta el helado, que sea tu postre, luego de haber comido algo más saludable, ya que si uno busca llenarse con los caprichos es cuando entra en desequilibrio.

Puede que algunos consideren que estás loco y no estarán de acuerdo con entrenar en vacaciones. Además, dirán que las vacaciones están para “no hacer nada”. No hagas caso a los comentarios. Sos vos quien disfrutará al máximo de tus vacaciones.

Lo más probable es que aquellos que reprochen tu idea les gustaría ser igual, pero no tienen la misma voluntad. En vacaciones, invitá a tus amigos y familia a entrenar con vos pero recordá que si entrenas solo, también está bien. Tus vacaciones, tus normas.

Te invitamos a que las disfrutes con equilibrio y sientas los beneficios de hacerlo, no te vas a arrepentir.