¿Realmente existe esa capacidad? La verdad es que no. Engordar, es decir, ganar masa grasa tiene que ver con múltiples factores y no con un simple alimento. Cuando aumentamos grasa corporal es porque por tiempo mantenido hemos llevado una alimentación poco saludable y acá entra tipos de alimentos, cantidades, frecuencias, modo de preparación, combinación, es decir, mucho más complejo como para cargarle toda la responsabilidad a un alimento individual. Además hay que tener en cuenta la imprescindible actividad física, sin ella no hay alimento mágico que nos ayude a mantener una composición saludable.

Lo que sí es cierto es que hay dosis y modo de alimentarnos que nos enferman, que nos quitan salud. Engordar puede ser el resultado, pero no es a lo que debe apuntar tu preocupación. Nuestro objetivo es obtener más salud, bienestar, vivir con energía, sentirnos bien. Esa es la verdadera meta por la cual debemos preocuparnos y ocuparnos en cuanto a lo que comemos y cómo nos movemos, porque ese punto es lo que nos hará pensar en toda la vida y no un momento, una foto momentánea con poca trascendencia. 

Empecemos a preguntar y a cuestionar si un alimento es saludable o poco saludable y en base a eso veamos de qué forma lo incorporamos o no a nuestra alimentación.

El estilo de vida (nutrición + entrenamiento + descanso) es el que define nuestra salud. ¿Cómo querés sentirte?