Las proteínas (carnes de todo tipo, huevos, lácteos descremados) son el nutriente más difícil de digerir, por lo que cada vez que hay proteínas en una comida, nos aseguramos mantenernos más tiempos satisfechos y de gastar calorías en digerir esos alimentos.

El batido tiene proteínas de buena calidad (completas en aminoácidos) pero estas proteínas pierden el valor metabólico (trabajo digestivo, gasto de calorías en su digestión) debido a que están pre-digeridas para poder pasar directamente al torrente sanguíneo y llegar rápidamente a los músculos.

Por todas estas razones, no se recomienda utilizar batidos en reemplazo de las comidas principales. Si tenés poco apetito podés comer medio bife con ensalada o jamón y queso, un huevo, etc. Si tenemos más apetito podemos comer uno o más bifes, pero no reemplazar la proteína de los alimentos por la proteína de los batidos en las comidas.

Como bien dice el título, comer inteligentemente implica hacerlo de manera que podamos escuchar a nuestro cuerpo. Comer hasta estar satisfechos pero siempre buscando la saciedad con el trabajo digestivo. No hay que "tomarse" las calorías, porque éstas se absorben sin que el estómago trabaje. Hay que saciarse, buscando placer pero con trabajo digestivo para que el metabolismo trabaje, genere saciedad y aumente el gasto calorico total diario.