Carnes: ¿por qué debemos comerlas?

Cuando hablamos de carnes, no se hace referencia sólo a la carne de vaca, sino también a las carnes de pollo, cerdos, pescados, mariscos y todo tipo de animal de consumo.

Las carnes son una excelente fuente de proteínas de alto valor biológico, ya que contienen todos los aminoácidos esenciales.

Estos aminoácidos son esenciales para todo tipo de construcción, regeneración y/o crecimiento de cada célula de nuestro organismo, desde nuestro ADN, hasta el pelo, piel, uñas, órganos, neurotransmisores, masa muscular, etcétera. Todo crece, se construye y regenera gracias a las proteínas y sus aminoácidos. Es por esto que la función principal de las proteínas es estructural, término que viene de estructuras, construcción.

¿Somos carnívoros?

Harvard hace ya un tiempo derrotó al veganismo y estableció que el consumo de proteínas animales ha sido determinante para el desarrollo humano, incluso antes de que el fuego se usara para cocinar. Para lograr un cuerpo magro y saludable debemos incluir las carnes diariamente.

De esta forma, podemos afirmar que son nuestras mejores aliadas, tanto para aumentar masa muscular como para bajar grasa corporal, ya que las proteínas presentes en las carnes, por su textura, exigencia de masticación y trabajo digestivo que requieren, nos otorgan un alto poder de saciedad. Además, las proteínas nos ayudan a vernos mejor, porque conforman la estructura de nuestro ADN, mejorando la piel, el pelo, las uñas y la silueta.

Nos nutren por dentro y eso se nota también por fuera.

No debemos preocuparnos por comer carne, por el contrario, debemos ocuparnos de comerla diariamente. Lo que sí debemos elegir son cortes magros, con poca grasa y variar los tipos de carnes.

Estos son cortes magros de diferentes carnes:

Vacuno: lomo, nalga, peceto, cuadrada, paleta, bola de lomo, cuadril, tortuguita, palomita, bife ancho y bife angosto.
Cordero: paleta y pierna.
Cerdo: pata trasera y carré.
Carnes blancas: vizcacha, cabrito, conejo, liebre, perdiz, pollo y pavo. Todas, sin la piel, son magras y el corte con menor grasa es la pechuga.
Pescados: brótola, corvina, merluza, pejerrey, pollo de mar, salmón rosado.
Mariscos: langosta, langostino, centolla, cangrejo, camarones, pulpo, caracol, calamares, ostras, almejas, vieiras, mejillones, berberechos.

| Podés encontrar información adicional sobre las carnes en nuestro Diccionario. |

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